(dpa) – La Policía federal de Alemania llevó a cabo ayer redadas en todo el país contra una presunta banda de tráfico de personas y detuvo a dos sospechosos en Berlín.
La operación, en la que participaron cerca de 170 agentes, a petición de la Fiscalía de Berlín se dirigió contra una asociación familiar polaco-siria, acusada de encargarse principalmente de introducir en Alemania ilegalmente a sirios desde los Estados del Golfo a través de Polonia. Con estas actividades, el grupo habría ganado cerca de 300.000 euros (367.000 dólares).
El truco de los delincuentes era conseguir capciosamente visados de turista polacos para refugiados con datos falsos y luego continuar el viaje hacia Alemania. Una vez allí, los refugiados presentaban sus solicitudes de asilo.
«Se debe poner fin a las actividades de quien hace negocio con la necesidad de este tipo de personas», declaró el ministro de Interior alemán, Thomas de Maizière, sobre la operación.
Varios de los sospechosos están acusados no sólo de tráfico de personas, sino también de fraude social o fraude en la solicitud de asilo. Algunos miembros de la banda con origen sirio y nacionalidad polaca se registraron en Alemania con diferentes datos personales como solicitantes de asilo perseguidos políticamente, de acuerdo con la Policía alemana.
Ayer por la mañana, los agentes registraron 15 inmuebles en todo el país, de los cuales ocho estaban en Berlín. El resto estaba en Renania del Norte-Westfalia, el Sarre, Sajonia-Anhalt, Baja Sajonia, Baden-Wurtemberg y Baviera. Las autoridades se incautaron de teléfonos móviles y dispositivos de almacenamiento de datos.