Los Angeles, 3 feb (dpa) – Es uno de los grandes de Hollywood, aunque llegó tarde. Tenía ya 38 años cuando presentó en los cines «Thief» (1981), con James Caan como ladrón, pero ya se intuía su sello: el thriller de éxito, que llegaría después con títulos como «Heat» y «Collateral». Mann, que el lunes cumple 75 años, es un maestro de la de la fría violencia en pantalla.
Como director siempre se ha sentido responsable de hasta el más mínimo detalle. «Mis decisiones creativas, como qué actores escoger, las arrugas que se ven en la cortina, el vestuario, la música, la edición, todo es culpa mía, todo es mi responsabilidad. Esa es la razón por la que hacer cine es siempre tan emocionante», dijo en octubre pasado Mann en la ciudad francesa de Lyon, donde estuvo conversando con Thierry Frémaux, director artístico del Festival de Cannes, así como con su colega mexicano Guillermo del Toro, cuya última fábula «La forma del agua», está nominada a 13 Oscar.
Del Toro reveló durante el encuentro ser un gran admirador del «maestro moderno del cine estadounidense», según reportó la revista «Variety». Mann rodó en «Heat» una de las mejores escenas de robo de la historia del cine y uno de los mejores primeros planos de Robert De Niro, elogió Del Toro.
«Heat» (1995) es un duelo interpretativo entre De Niro y Al Pacino. Fue la primera película en la que participaban juntos los dos grandes monstruos de la interpretación, aunque cada uno estaba situado a un lado de la ley: Al Pacino como teniente de la policía de Los Angeles y De Niro como ladrón profesional. Mann aportó además una composición elaborada de los planos y remató la historia, que fue un éxito de crítica y público, con un inolvidable final y una de las escenas con más disparos en la historia del cine.
Durante 12 años estuvo trabajando en el guión. Se preparó a conciencia hablando con policías y también ladrones. Vivió 19 años en Los Angeles y, a pesar de todo, le costó mucho tiempo localizar los lugares idóneos donde rodar, dijo entonces a dpa el realizador que creció en Chicago. Hubo barrios, agregó, que conoció tras acompañar a la policía.
Pero «Heat» no es solo un thriller de acción pura y dura. Las películas de Mann también son siempre estudios de los personajes. Tanto el policía como el brutal ladrón son hombres con una vida privada que está a punto de colapsar. Teniendo en cuenta su intensa documentación y sus minuciosos preparativos a la hora de rodar, no es de extrañar que a lo largo de su larga carrera apenas haya rodado poco más de una docena de películas.
En «Hunter» (1986) llevó a la gran pantalla el asesino en serie Hannibal Lecter, que más tarde se convirtió en figura de culto con «The Silence of The Lambs». Convirtió a Daniel Day-Lewis en «El último mohicano» (1992) y con Russell Crowe y Al Pacino rodó «Insider» (1999), un trhiller sobre las maquinaciones de la industria del tabaco. Hizo subir al ring de boxeo a Will Smith en «Ali» (2001) y transformó a Tom Cruise en un despiadado asesino en serie en «Collateral» (2004).
Con «Miami Vice» hizo una de las versiones más sombrías de la mítica serie de televisión, de la que Mann fue productor en los años 80. En la serie original, Don Johnson y Philip Michael Thomas daban vida a los policías James «Sonny» Crockett y Ricardo Tubbs, que perseguían a delincuentes por la soleada Miami. En la versión cinematográfica, Colin Farrell y Jamie Foxx asumen los papeles principales.
Y como los delitos se van modernizando, en 2015 indagó en el ciberthriller, donde Chris Hemsworth interpreta a un astuto hacker que persigue a un grupo de ciberdelincuentes.
El realizador, cuya hija también se dedica al mismo oficio, preparara desde hace tiempo una película que no se desarrollará en el mundo de los maleantes. Mann quiere llevar a la gran pantalla la vida del fabricante de autos y el piloto Enzo Ferrari (1898 – 1988). El rodaje comenzará a mediados de año, según señaló el portal de cine «Deadline.com». Y de nuevo el realizador quiere apostar alto con Hugh Jackman en el papel principal.
Por Barbara Munker