(dpa) – La canciller alemana, Angela Merkel, y sus potenciales aliados en un próximo gobierno aceleran el paso y quieren cerrar a fines de la semana que viene las actuales negociaciones para dar lugar a una renovada coalición que garantice un gobierno duradero para los próximos cuatro años.
Las negociaciones entre el bloque conservador de social y demócrata cristianos de Merkel y el Partido Socialdemócrata de Martin Schulz, iniciadas formalmente hoy en Berlín, deberán concluir a más tardar el domingo 4 de febrero, coincidieron hoy portavoces de las tres agrupaciones.
La propia Merkel expresó su «optimismo» por llegar a un acuerdo que le permitirá iniciar su cuarto mandato consecutivo al frente del Ejecutivo.
Merkel aseguró que es indispensable formar un nuevo gobierno para darle no solo un nuevo impulso a Europa sino también «una mayor dinámica al país», abriendo las negociaciones con «optimismo pero también con firmeza» en la defensa de los intereses políticos de su partido.
La democristiana Merkel, el socialcristiano Horst Seehofer y el líder socialdemócrata, Martin Schulz, dieron hoy el primer paso, en una reunión tripartita en la sede de la CDU en Berlín, que desembocó en sesiones de trabajo de 18 grupos especializados en distintas áreas. Las deliberaciones internas se prolongarán en los próximos días y el 3 y 4 de febrero habrá un encuentro de máximo nivel para analizar los resultados en forma definitiva.
Schulz anunció que serán negociaciones rápidas y constructivas, para formar un gobierno «más justo» para el conjunto de la sociedad alemana y, en el plano internacional, «volver a ser una de las fuerzas propulsoras» de la Unión Europea.
Las negociaciones se perfilan arduas. La cúpula socialdemócrata llegó debilitada al encuentro tras recibir un mandato por un margen muy estrecho en un congreso en el que quedó patente el descontento de muchos de volver a gobernar como socio menor de Merkel, como en los últimos cuatro años.
Aún en caso de que los tres partidos sellen un pacto para formar gobierno hasta el próximo domingo, la formación de un gobierno se podría demorar hasta fines de marzo, es decir más de medio año después de haberse celebrado elecciones, un lapso de tiempo nunca vivido en la historia de la república.
Alemania está dirigida por un Gobierno en funciones desde hace más de 120 días. Merkel y sus conservadores ganaron las elecciones del 24 de septiembre, pero sin alcanzar la mayoría necesaria para gobernar. El SPD anunció en ese momento que se pasaría a la oposición tras recibir el peor revés electoral desde 1949.
Esto llevó a Merkel a intentar forjar sin éxito una inédita alianza con el Partido Liberal (FDP) y Los Verdes. Tras el fracaso de este primer intento, el SPD accedió al llamamiento del presidente federal alemán, Frank-Walter Steinmeier, y se reunió con los conservadores para evitar la repetición de elecciones.
Por Esteban Bayer