San Salvador, 3 mar (dpa) – Las autoridades salvadoreñas desplegaron más de 30.000 efectivos de seguridad para las elecciones de diputados y alcaldes que se llevarán a cabo el domingo en el país centroamericano, uno de los más violentos de la región.
«Hemos revisado los dispositivos que tendrán los cerca de 23.000 policías y 11.000 soldados, y ello nos permite decir anticipadamente que estamos bien, sólo afinando detalles», declaró el director de la Policía Nacional civil (PNC), Howard Cotto.
En elecciones anteriores, de 2014 y 2015, hubo grupos de pandilleros que les decomisaron los documentos a ciudadanos para que no ejercieran el sufragio.
Las del domingo serán las novenas elecciones para alcaldes y diputados desde el final de la guerra civil en 1992, y esta vez están habilitados 5,2 millones de salvadoreños.
Los analistas locales destacaron que estas elecciones son importantes porque tienen lugar un año antes de las presidenciales de 2019. Por eso, muchas las consideran un referendo sobre el actual gobierno del izquierdista Salvador Sánchez Cerén.
Los principales rivales son el oficialista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y la derechista Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).
Las últimas encuestas indican que la opositora ARENA será la triunfadora y que logrará una mayor bancada legislativa, una mayor porción de gobiernos locales, incluida la alcaldía de la capital, San Salvador, ahora en manos del FMLN.