Ciudad de México/Miami, 15 feb (dpa) – José José, no en vano conocido como «el príncipe de la canción», cumplirá el próximo sábado 70 años en medio del misterio que rodea su estado de salud, un talón de Aquiles que lo ha tumbado en más de una ocasión.
Elegancia, galantería y gran capacidad vocal son solo algunas cualidades que definen a José José, el cantante mexicano que interpretando canciones románticas se hizo famoso hace medio siglo y desde ese entonces ha cosechado triunfos y reconocimientos en todo el mundo.
«Qué triste fue decirnos adiós cuando nos adorábamos más, hasta la golondrina voló presagiando el final», es la primera estrofa de la canción que todos sus seguidores siempre recuerdan. «El triste» se convirtió desde 1970 en un ícono para la carrera de José Sosa, apodado por el propio Frank Sinatra como «el príncipe de la canción».
Pero no todo fue color de rosa para el cantante. La efervescente fama que desde temprana edad lo envolvió fue la misma que lo alejó de sus hijos y su familia y lo hizo, como él mismo lo reconoció, un hombre «sin carácter que no tomaba decisiones propias».
«Yo era un pusilánime completo, inocente e ignorante, débil de carácter», dijo en 2008 durante el lanzamiento de su libro autobiográfico «Ésta es mi vida», en el que además de relatar las difíciles situaciones que vivió sumido en el alcohol y las drogas, contó la forma en que, junto a Dios, salió «de ese infierno».
Nació el 17 de febrero de 1948 en la capital mexicana en el seno de una familia invadida por las notas musicales. Su padre, José Sosa, un tenor de ópera, y su madre, Margarita Ortiz, una pianista, les inculcaron desde siempre la música clásica a él y a sus dos hermanos menores Octavio y Héctor.
A los 15 años el joven ya había decidido su camino: ser músico. Su color de voz era característico de un barítono lírico y en esa dirección creó un trio para ofrecer serenatas sin mayor trascendencia en la capital mexicana.
Sin embargo, el éxito y la fama comenzaron a rodearlo hasta comienzos de los años 70 cuando adoptó el nombre artístico dos veces José en honor a su padre recién fallecido.
«El triste» retumbó hace 48 años en el Festival de la Canción Latina, conocido hoy como la OTI, cuando representó a su país y se llevó un refutado tercer puesto pese a ser el favorito de la gente.
Con 22 años, José José no vio la dimensión de lo que para él venía. Ventas de millones de discos por todo el mundo, lujos, drogas, mujeres y alcohol. La adicción, que también acabó con su padre, comenzó a oscurecer el camino de gloria que ya estaba labrado para «el príncipe».
Desde esa época comenzaron los quebrantos de salud que lo mantuvieron durante varios meses ingresado en hospitales, en los que el cantante también armaba fiestas.
Se casó tres veces. La primera en 1970 con Natalia Herrera, nieta del ex presidente mexicano Plutarco Calle (1924-1928); la segunda con la actriz Ana Noreña, conocida como Anel, con quien tuvo dos hijos: José Joel y Marysol; y la tercera y vigente con la cubana Sara Salazar, madre de su hija menor Sarita.
La década de los años 90 fue tal vez la más difícil de toda su carrera. Se divorció de Anel tras 17 años de matrimonio y vivió por varios meses en un taxi abandonado en el poblado de Tulyehulco, cercano a Ciudad de México. Allí resistió días oscuros ahogado entre las drogas y el alcohol y en medio de una profunda depresión.
«Quería morirme pero no lo logré», recordó en una ocasión el artista que padeció de la enfermedad de lyme, la cual le provocó parálisis facial. La diabetes, una deficiencia pulmonar y una lesión en las cuerdas vocales lo alejaron poco a poco de los escenarios.
En marzo del año pasado le fue diagnosticado un cáncer de páncreas. Como de costumbre, el príncipe acalló los rumores de su supuesta muerte en un mensaje dirigido a sus millones de seguidores.
«En este día maravilloso quiero contarles que estuve muy pendiente de mi salud y al ver que no ganaba peso me hice unos estudios. En estos últimos tres años me fui haciendo más chiquito y aquí (en México) me encontraron un tumor chiquitito en el páncreas», reveló él mismo en un video publicado en Internet.
El tratamiento de radioterapia y quimioterapia tuvo efecto y en noviembre pasado le fue extirpado el tumor con éxito. Aunque tuvo una recaída hace poco menos de un mes que lo obligó a internarse en un hospital de México, José José insiste en que está «de maravilla».
Lo último que se supo de él fue que llegó el 7 de febrero a Miami bajo total hermetismo. No se le ha visto en cámaras pero sí ha enviado mensajes a sus fans. «Querida familia, gracias por preocuparse estoy muy bien de salud y quiero que lo sepan por mí mismo. No estoy grave ni muerto», escribió en Twitter.
Por Tatiana Rodríguez (dpa)