La Guardia Civil, en el marco de la Operación Perkunas, ha desmantelado una organización dedicada al cultivo “indoor” de marihuna en la localidad de Llinar del Vallés (Barcelona), procediendo a la detención de 3 personas (2 españoles y 1 ingles) vecinos de Valencia, Lliça de Vall y Barcelona, respectivamente, integrantes de una estructura criminal dedicada a la elaboración y tráfico de drogas y su distribución en España y en otros países europeos.
En la operación se han intervenido 5.856 plantas y más de 89 kilos de esta droga ya procesada en una de las mayores plantaciones “indoor” de Cataluña, además de 3.326 kilos de hachís (polen y resina)
Los responsables de esta estructura criminal habían ideado un sistema ‘narcokupa’ ya que usaban naves embargadas por bancos para sus actividades de producción de droga y como base de operaciones para el narcotráfico.
Cabe destacar, que la droga era cargada en camiones con destino al resto de España y a otros países europeos oculta tras palets de comida. Además, para mantener en funcionamiento la planta de producción de marihuana desmantelada, habrían cometido un fraude eléctrico de 430.000 euros.
La operación se inició el pasado mes de febrero, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la existencia de una nave industrial ubicada en un polígono de Llinars del Vallés en la que se podría haberse instalado una gran plantación hidropónica de marihuana de alto rendimiento y producción masiva de esta droga.
Continuando con las investigaciones, los agentes pudieron determinar que la plantación podría encontrarse instalada en una nave industrial de un polígono con numerosas naves embargadas por diferentes bancos. Asimismo, se pudo constatar que los integrantes de la organización habían ‘ocupado’ varias de estas naves para desarrollar sus acciones delictivas en un entorno apropiado en cuanto a factores de logística y discreción.
Una vez recabada toda la información, los agentes procedieron a realizar una entrada y registro en la nave industrial y en el domicilio de una de las personas investigadas, procediendo en ese momento a la detención en Lliça de Vall (Barcelona) de uno de los integrantes de la organización
Durante el registro de la nave industrial los agentes hallaron una gran y sofisticada plantación hidropónica de marihuana, hasta el extremo de que la misma estaba compartimentada en varias salas donde se cultivaban las plantas según su estado de crecimiento.
Durante el registro de las instalaciones se pudo determinar que la plantación ocupaba un área total de cuatro naves industriales comunicadas por accesos y conexiones practicadas entre ellas por los integrantes de la red.
Igualmente, en el domicilio de Lliça de Vall los investigadores descubrieron una sala de crecimiento de esquejes de plantas de marihuana y otra destinada al secado de plantas y cogollos.
En el cómputo total de esta primera intervención fueron decomisados 6.231 gramos de polen de hachís, 1.514 gramos de marihuana, 504 esquejes y 5.352 plantas de marihuana en estado óptimo y apropiado para su próxima recolección, así como gran cantidad de material electrónico e infraestructura para adecuada para el mantenimiento de plantaciones de marihuana de alto rendimiento.
En una segunda fase de la operación, a mediados del mes de noviembre, los investigadores detectaron en una nave colindante a varias personas cargando palets de cajas y alimentos en un camión. Como consecuencia de la investigación posterior uno de los vehículos de la organización fue interceptado en La Junquera (Girona), donde agentes de la Guardia Civil comprobaron que en las cajas se transportaban 465 kilogramos de resina de hachís y 63’5 kilogramos de cogollos de marihuana, camuflados tras los palets con alimentos por lo que se procedió a la detención del conductor del camión.
Tras esta actuación también fue detenido en Llinars del Vallés el ciudadano británico cabecilla de este grupo criminal en el momento en que cargaba en su coche dos cajas con 48 kilogramos de hachís. Los agentes inspeccionaron otras dos naves que usaban los detenidos. En una de ellas fueron intervenidos 2.800 kilogramos de resina de hachís y varios palets de productos alimenticios; en la otra 24’5 kilogramos de marihuana procesada y una maquina industrial envasadora al vacío.
A los detenidos se les imputa la presunta comisión de delitos contra la salud pública en sus modalidades de tráfico de drogas y de cultivo o fabricación de sustancias estupefacientes y defraudación de fluido eléctrico en una cuantía de 430.000 euros.
Los alimentos intervenidos por la Guardia Civil han sido donados a Caritas de Llinars del Vallés
La operación ha sido desarrollada por El Área de Delincuencia Organizada y Antidrogas (EDOA) de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Barcelona y dirigida por el Juzgado de Instrucción nº 3 de los de El Prat de Llobregat.