Damasco/Harasta, 24 mar (dpa) – El Ejército de Sirio comenzó a retirar barricadas en la ciudad de Harasta, consiguiendo así avanzar en una de las últimas zonas en manos de los insurgentes en Guta Oriental, informó la agencia oficial de noticias Sana.
Según la información, los ingenieros del Ejército están preparados para desactivar los explosivos que han sido colocados en la zona.
La noche del viernes abandonaron el lugar los últimos combatientes del grupo insurgente Ahrar al Sham, en este enclave insurgente al oeste de Damasco.
De esta forma el Ejército leal al presidente Bashar al Assad controla ya del 90 por ciento de la región de Guta Oriental, que desde 2013 permanecía asediada por los militares.
Fuentes militares sirias indican que más de un millar de insurgentes huyeron con sus familias. La región está sufriendo los ataques más intensos por parte de las tropas del Gobierno desde el inicio de la guerra civil hace siete años. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, más de 1.600 civiles han muerto en este operativo.
Los insurgentes de Harasta llegaron hoy con autobuses al noroeste del país, controlado por insurgentes, según señalaron los activistas del Osbservatorio. Se estima que unas 4.700 personas salieron de Harasta en los últimos días.
Los opositores al Gobierno controlan solo dos zonas pequeñas, separadas una de la otra, en Guta Oriental. Tras el acuerdo con Ahrar al Sham, el Ejército sirio llegó también a un acuerdo bajo mediación Rusia con la milicia islamista Failak al Rahman para retirarse de una de las dos zonas. A los insurgentes sólo les quedaría una pequeña área en el norte de Guta Oriental.