La Paz, 3 mar (dpa) – El ex presidente boliviano Gonzalo Sánchez de Lozada (2002-2003) será sometido a un juicio civil desde el lunes en Estados Unidos por la muerte de nueve personas en el marco de la crisis que enfrentó su Gobierno en 2003 y que derivó en su renuncia.
Si es condenado, deberá pagar una indemnización a los familiares de los fallecidos, que impulsaron el juicio contra el ex mandatario, quien reside en Estados Unidos desde 2003.
Sánchez de Lozada deberá comparecer desde el lunes a las audiencias orales en la corte de Fort Lauderdale. En el proceso también está incluido Carlos Sánchez Berzaín, ex ministro de Defensa del acusado, informó por teléfono a dpa el abogado boliviano Rogelio Mayta, asesor de los demandantes.
Mayta señaló que la principal acusación contra Sánchez de Lozada y su ministro tiene que ver con planificar ejecuciones extrajudiciales y otros delitos de lesa humanidad que pudieron cometerse durante la represión militar contra las protestas ciudadanas que se dieron entre septiembre y octubre de 2003.
El ex mandatario y el ex ministro residen en Estados Unidos desde octubre de 2003, cuando Sánchez de Lozada dimitió 14 meses después de haber iniciado su segundo mandato. Antes había gobernado Bolivia entre 1994 y 1997.
Entre los demandantes está Etelvina Ramos, cuya hija de ocho años murió por una bala que ingresó a su dormitorio; Teófilo Baltazar, cuya esposa falleció en su casa por una bala perdida y Felicidad Rosa Huanca, por el asesinato de su padre por varios disparos en una carretera de La Paz.
El abogado Mayta recibe apoyo en Estados Unidos del Centro de Derechos Constitucionales (CCR, por sus siglas en inglés) y del bufete de Akin Gump Strauss Hauer & Feld, de Miami, además de la Clínica de Derechos Humanos Internacionales de la Facultad de Harvard.
La abogada del CCR Beth Stephens informó en una entrevista que publicó la pasada semana el diario «La Razón» que esta fase del juicio es ágil y que puede durar hasta cuatro semanas hasta que se conozca la sentencia.
La crisis de octubre de 2003 provocó la muerte de al menos 60 personas y un centenar de heridos en las ciudades de El Alto y La Paz. Por estos hechos, el Tribunal Supremo de Justicia de Bolivia enjuició a los jefes militares de ese entonces y pidió la extradición de Sánchez de Lozada.
El presidente boliviano, Evo Morales, pidió la pasada semana desde su cuenta en Twitter a su homólogo estadounidense Donald Trump facilitar la extradición de Sánchez de Lozada para que se someta a un juicio de responsabilidades en Bolivia.