Berlín, 31 ene (dpa) – El Gobierno federal de Alemania cree que aún es pronto para comenzar a relajar las medidas de protección frente al coronavirus, según declaró hoy en Berlín el portavoz del Ejecutivo, Steffen Hebestreit.
«En el momento en que consideremos que podemos relajarnos de forma responsable, este Gobierno federal y todos los gobiernos de los estados (federados) darán exactamente ese paso», dijo.
Sin embargo, todavía se está en una fase en la que las cifras suben, cada día hay nuevos récords y la cresta de la ola aún no se ha alcanzado, añadió. «Y en este sentido, yo advertiría de que no hay que creer demasiado pronto que ya se ha acabado».
Alemania volvió a batir hoy el récord de incidencia de coronavirus en siete días, con 1.176,8 casos cada 100.000 habitantes, según las cifras proporcionadas por el Instituto Robert Koch (RKI).
Las autoridades sanitarias comunicaron al RKI un total de 78.318 nuevos contagios en un día y 61 muertes. Hace una semana fueron 63.393 infecciones y 28 decesos.
Los expertos creen sin embargo que el número de casos no registrados en los datos del RKI es elevado y seguirá aumentando, en parte porque las oficinas sanitarias están al límite en muchos lugares.
Además, algunas ciudades y distritos llevan días informando de problemas en la transmisión de los datos.
También se ha ralentizado el ritmo de vacunación. Según el RKI, el fin de semana se administraron unas 242.000 vacunas contra el virus, cuando el fin de semana anterior había habido alrededor de 392.000, y dos semanas antes incluso más de 600.000.
Las cifras implican que no se cumplirá el objetivo del gobierno de vacunar al menos una vez al 80 por ciento de la población hasta finales de enero. Hasta el domingo la cifra se situaba en un 75,8 por ciento.
Según el RKI, 61,5 millones de personas (el 74 %) se han vacunado de forma básica y completa con la segunda dosis. Al menos 43,9 millones de personas (el 52,8 %) han recibido también una vacuna de refuerzo.
Según las estadísticas, el 24,2 por ciento, un total de 20,2 millones de personas, no están vacunadas. Sin embargo, esta estadística incluye a los niños menores de cuatro años, para los que no se dispone de una vacuna, y además el RKI recuerda que se trata de tasas mínimas, porque hay casos en los que no se registra o notifica correctamente la inmunización.
El tema de la vacunación centra las preocupaciones de los alemanes al inicio del tercer año de pandemia, según una encuesta de la aseguradora R+V conocida hoy.
Al 55 por ciento de los alemanes le preocupa que sigan produciéndose nuevas olas de coronavirus mientras no todo el mundo esté vacunado. En el sondeo especial sobre los «Temores de los alemanes ante la crisis de covid 2022», este tema supera a todas las demás preocupaciones.
En el estudio hecho en enero, el 43 por ciento dijo temer una infección de coronavirus, frente al 35 por ciento al que le asustaba esta posibilidad a mediados de 2021.
Llama la atención que un número significativamente menor de personas (38 %) tiene miedo a una mala situación económica, sobre todo en comparación con una encuesta anterior del invierno europeo de 2021, cuando este porcentaje se elevaba al 59 por ciento.
«En Alemania prevalece el optimismo económico», explica Manfred G. Schmidt, politólogo de Heidelberg. «Esto se alimenta de la convicción de que la contracción de la economía relacionada con la pandemia ha terminado y que las señales apuntan al crecimiento en 2022».