El microondas acumula restos de comida y humedad con facilidad. Un método sencillo con vapor permite limpiarlo sin frotar y mantenerlo en buen estado con apenas unos minutos de uso semanal.

Preparar una limpieza rápida con vapor
El vapor es uno de los métodos más eficaces para ablandar la suciedad del microondas sin necesidad de productos agresivos. Para aplicarlo, basta con llenar un recipiente apto para microondas con agua y añadir unas gotas de limón o un poco de vinagre blanco. Ambos ayudan a desprender olores y facilitan que los restos de comida se despeguen de las paredes.
Colocar el recipiente en el centro del microondas y calentar durante cinco a siete minutos permite que el vapor se acumule en el interior. Una vez finalizado el ciclo, es recomendable dejar la puerta cerrada un par de minutos más para que el vapor actúe sobre la suciedad seca.
Retirar restos sin esfuerzo y mantener el plato giratorio
Después del proceso de vapor, los restos adheridos suelen desprenderse con facilidad. Un paño humedecido con agua tibia basta para limpiar las paredes internas, la puerta y la parte superior. Conviene retirar el plato giratorio y lavarlo por separado con agua y detergente, igual que cualquier plato de cocina.
El marco interior de la puerta y las rejillas laterales también acumulan suciedad con el tiempo. Un repaso suave con un paño evita que estos restos se incrusten y ayuda a mantener el microondas en buen estado.
Hábitos que reducen la suciedad diaria
Evitar que la suciedad se acumule requiere pequeños gestos. Cubrir los alimentos al calentarlos reduce salpicaduras y mantiene las paredes más limpias. Los recipientes con tapa apta para microondas o las campanas protectoras reutilizables funcionan bien para este fin.
Secar el interior después de un uso prolongado ayuda a evitar la humedad, especialmente si se calientan líquidos. Si el microondas se utiliza a diario, es recomendable realizar una limpieza rápida con vapor una vez a la semana. Este mantenimiento ligero evita limpiezas profundas y alarga la vida útil del aparato.
Mantener el microondas limpio con regularidad permite que funcione correctamente y evita malos olores en la cocina.