El Servicio de Salud del Principado (Sespa) ha aumentado un 30% la actividad quirúrgica en el primer trimestre respecto al mismo período de 2021. El incremento se produjo especialmente en marzo, cuando se registraron cifras superiores al mismo mes de años anteriores a la pandemia, concretamente 6.505 intervenciones programadas, lo que supone 1.755 más que en febrero, 2.113 más que hace seis meses y 859 por encima de marzo de 2019.
La disminución de la incidencia de la covid a lo largo del mes de marzo, que se cerró con 21.643 cirugías pendientes, alivió la presión asistencial, tanto en hospitalizaciones como en ingresos en UCI. Esta situación permitió aumentar la actividad en quirófanos y consultas externas, así como efectuar un mayor número de pruebas de diagnóstico.
En este contexto, el Sespa intensificó la programación de pacientes con esperas superiores a 90 y 180 días para una intervención, de modo que a finales de marzo las personas en esta situación se habían reducido en 919 respecto a febrero.
El incremento de la actividad también permitió rebajar en 6 días respecto a febrero el tiempo medio de espera por una operación, al situarse en 89 días, 19 menos que hace seis meses. Así, la demora media ha bajado de 90 días por primera vez en los últimos 8 meses y se ha reducido en 13 de las 15 especialidades quirúrgicas. Son especialmente significativos los descensos en las cirugías cardiaca, maxilofacial y pediátrica; también en ginecología, traumatología, urología y dermatología.
Más consultas y pruebas
Los especialistas hospitalarios del Servicio de Salud atendieron 172.250 consultas en marzo, un 15,5% más que en febrero (149.129), con lo que se consolida el incremento de actividad por cuarto mes consecutivo. Estas cifras superan incluso a las registradas en marzo de 2019, cuando se realizaron 156.159.
Este incremento ha facilitado una reducción de la demora media para primeras consultas, que se sitúa en 67 días, 8 menos que en febrero. Las mayores bajadas se registran en oftalmología, urología y cirugía general.
En cuanto a las pruebas de diagnóstico, se realizaron 37.985, un 11% más que en febrero y un 10% por encima de marzo de 2019, cuando se efectuaron 34.584.
El aumento de la actividad también se refleja en la disminución de la demora media para someterse a una ecografía, un escáner, una resonancia y una colonoscopia.