Nueva York, 10 abr (dpa) – El Departamento de Justicia de Estados Unidos dio luz verde a la «megafusión» entre la farmacéutica alemana Bayer y su competidora estadounidense Monsanto, según informó ayer el diario «The Wall Street Journal».
Autoridades antimonopolio estadounidenses decidieron aprobar la adquisición de Monsanto por parte de Bayer luego de que ambas compañías acordaran deshacerse de parte de sus activos para obtener el visto bueno a la operación, valuada en 60.000 millones de dólares, informó el periódico en base a fuentes cercanas a las negociaciones.
No obstante, se trata sólo de un acuerdo en principio y se desconoce cuándo será la aprobación final. El Departamento de Justicia declinó hacer comentarios.
Monsanto y Bayer ratificaron su confianza en obtener todos los permisos necesarios para completar la adquisición en el segundo trimestre. A fines de marzo, la Comisión de la Unión Europea (UE) ya había autorizado la fusión.
Sin embargo, condicionó la operación a que «garanticen que habrá una competencia efectiva e innovación en semillas, pesticidas y mercados agrícolas digitales», según indicó la comisaria de Comercio del bloque, Margrethe Vestager.
La noticia fue bien recibida por el mercado: las acciones de Bayer subieron en casi un 2 por ciento en la Bolsa de Fráncfort a horas del cierre, mientras que los títulos de Monsanto treparon casi un 7 por ciento en Nueva York.
Dado el alcance internacional y el poder en el mercado de las dos empresas, la fusión será controlada por comisiones de competencia de todo el mundo. Bayer confirmó en marzo que más de la mitad de las autoridades que necesitan aprobar el negocio ya lo han hecho, entre ellas las de China y Brasil, uno de los mercados agrícolas más importantes del mundo.
La denominada «megafusión» no ha sido recibida con agrado por los ambientalistas y otras organizaciones de ayuda, pues Monsanto ha sido muy criticada por sus productos modificados genéticamente y por el uso del glifosato.