Buenos Aires, 27 mar (dpa) – El basquetbolista argentino Luis Scola consideró que la modalidad de baloncesto 3×3, que será deporte olímpico en los Juegos de Tokio 2020, le genera «mucha expectativa» y puede resultar una herramienta para «hacer crecer al deporte».
«Tenemos todos muchas expectativas con respecto al básquetbol 3×3. Particularmente a los argentinos nos permitiría tener la posibilidad de abrirnos a espacios que no teníamos, como las calles o los parques», expresó Scola este lunes luego de recorrer la Villa Olímpica en la que se alojarán los deportistas que participarán de los Juegos de la Juventud Buenos Aires 2018.
En declaraciones a diferentes medios de prensa, entre ellos dpa, el capitán de la selección argentina opinó que el baloncesto 3×3 es una modalidad «más fácil para jugar informalmente porque no se necesita un equipo de cinco jugadores ni una liga».
«Pienso que sería contar con lo que tiene nuestro fútbol, que se puede jugar en una calle o una plaza poniendo dos piedras como arco. Al final, eso termina por hacer crecer al deporte porque permite generar más jugadores», evaluó.
El baloncesto 3×3, como indica su nombre, lo juegan tres jugadores por equipo, sólo se permite un suplente y se utiliza menos de la mitad de un campo normal.
Los partidos tienen una duración de diez minutos, el tiempo de posesión por ataque es de 12 segundos y los avances comienzan detrás de la línea de tres puntos.
Los partidos finalizan a los 10 minutos o cuando un equipo llega a 21 puntos. En caso de empate, triunfa el primero que convierta. Las canastas valen un punto y las que se convierten detrás de los 6,75 metros suman dos.
Hasta el momento, la modalidad 3×3 sólo se disputó en los Juegos de la Juventud.
«Con los deportes nuevos no hay, al principio, mejores ni peores, sino que resta saber quién se posiciona primero y abre las puertas para ser importante en una disciplina que será olímpica y que significará, en caso de ganar, una medalla», indicó Scola.
El argentino, de 37 años y 2,03 metros de altura, fue nombrado en julio pasado embajador de los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018.
En su trayectoria, Scola consiguió como integrante del seleccionado argentino la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y la de bronce en los de Pekín 2008.
Es uno de los máximos referentes de la llamada «Generación Dorada» del baloncesto argentino. En los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 fue el abanderado de la delegación de su país.
Desde mediados de 2017 juega en el Shanxi Brave Dragons, de China, luego de una extensa trayectoria en la NBA. Scola, que se inició en Ferro Carril Oeste de Argentina a los 15 años, vistió las camisetas de los Houston Rockets (2007-2012), Phoenix Suns (2012-2013), Indiana Pacers (2013-2015), Toronto Raptors (2015-2016) y Brooklyn Nets (2016-2017).
Antes de llegar a la NBA jugó entre 1998 y 2007 en la liga ACB de España. Lo hizo en el Gijón Baloncesto y en el Saski Baskonia (en aquella época, Tau Cerámica).
En 2016, luego de los Juegos de Río, Scola fue elegido miembro de la Comisión de Atletas del Comité Olímpico Internacional (COI), una designación que hizo pensar la posibilidad de que pueda transformarse en dirigente deportivo.
«Ahora mismo no tengo eso en mente porque estoy compitiendo, pero todo lo que se relacione con los Juegos Olímpicos es atractivo para mí», comentó.