Asunción, 9 mar (dpa) – Olimpia y Cerro Porteño, los dos clubes de mayor convocatoria del fútbol paraguayo, reeditarán mañana el superclásico local, en lo que se espera que sea una fiesta sin violencia.
El público agotó anticipadamente las 32.000 entradas y las autoridades han dispuesto un riguroso operativo de seguridad para evitar que haya enfrentamientos entre las barras bravas rivales.
El miércoles, los cabecillas de los grupos de hinchas organizados de ambas instituciones se comprometieron a colaborar para evitar incidentes, que se vienen repitiendo en los últimos años, incluso con la muerte de personas.
Se dispondrán zonas de exclusión y anillos de control para el ingreso y la salida del estadio Defensores del Chaco para evitar que los hinchas se encuentren.
En un amplio radio en las afueras del estadio y en toda la ciudad se efectuarán controles sobre portación de armas y consumo de alcohol, drogas y cualquier otra sustancia.
El superclásico paraguayo, que comenzará a las 20:00 GMT, será un duelo también de entrenadores argentinos, ya que este choque encuentra a Daniel Garnero en la conducción de Olimpia y su compatriota Luis Zubeldía en el banco de Cerro Porteño.
La última vez que dos técnicos argentinos estuvieron frente a frente en un superclásico paraguayo fue el 1 de marzo del 2015 cuando Leonardo Astrada dirigía a Cerro Porteño y Nery Pumpido a Olimpia.
Este nuevo choque encuentra a Olimpia en la cima de la tabla de posiciones del torneo Apertura con 13 puntos, en cinco partidos, mientras que su rival está séptimo con 6 puntos, fruto de tres empates, una victoria y una derrota.
A nivel internacional Olimpia fue eliminado por Junior de Colombia en la segunda fase de la Copa Libertadores, mientras que Cerro Porteño participa en el Grupo 1 donde debutó con victoria por 2-0 sobre el Monagas de Venezuela. Los otros rivales son Gremio de Brasil y Defensor Sporting de Uruguay.