Madrid, 14 feb (dpa) – Inmerso en la temporada más gris que se le recuerda, el futbolista portugués Cristiano Ronaldo apareció hoy una vez más para rescatar al Real Madrid de las garras del abismo con un doblete en su competición fetiche, esa Liga de Campeones que lo transforma.
El equipo blanco yacía en la lona tras el gol de Adrien Rabiot, que había adelantado al temido Paris Saint-Germain en el minuto 33. Pero Cristiano Ronaldo empató de penal justo antes del descanso y celebró el 2-1 en el 83′ tras un poco ortodoxo remate con la rodilla. Marcelo, dos minutos después, abrió el champagne y convirtió el Santiago Bernabéu en una auténtica fiesta.
«Reyes de Europa, somos los reyes de Europa», cantaba la hinchada del Real Madrid en los instantes finales, celebrando un 3-1 que le deja con muy buenas opciones para llegar a los cuartos de la Champions cuando pocos apostaban por una victoria del equipo blanco. Menos aún que fuera a viajar a París dentro de tres semanas con una renta de dos goles.
Rey de Europa es el Real Madrid y rey de Europa es Cristiano Ronaldo. El delantero de 33 años es el máximo goleador de la historia de la Champions con 116 goles en 147 partidos. De esa cifra, 101 han llegado con la camiseta del Real Madrid. Gracias a él, el club de la capital española ganó tres de las últimas cuatro Champions.
«Si hablamos de Cristiano Ronaldo, ha demostrado que está para las grandes noches», lo elogió hoy su entrenador, el francés Zinedine Zidane, cerca de la medianoche. Mientras, Cristiano Ronaldo salía del estadio con una enorme sonrisa y guiñando el ojo a los periodistas.
El partido de hoy era la oportunidad perfecta para que Cristiano Ronaldo se reivindicara. Fuera de la pelea por la Liga española y eliminado de la Copa del Rey, al Real Madrid y al delantero portugués sólo le quedaba la Champions como tabla de salvación. Una derrota hoy era prácticamente despedirse de la temporada.
El rival, el todopoderoso Paris Saint-Germain, elevaba todavía más la apuesta. Todo el planeta fútbol estaba pendiente del Santiago Bernabéu. Pero ni semejante escenario puede intimidar a este Cristiano Ronaldo, un jugador que se enciende con la más mínima chispa.
No está siendo una temporada sencilla para el astro del Real Madrid, bajo sospecha casi desde que comenzó la temporada por sus registros goleadores en la Liga española. El sábado hizo un «hat-trick» ante la Real Sociedad y mejoró su cifra hasta los 11 tantos en 23 jornadas, unos datos nada espectaculares para el actual Balón de Oro. Además, los rumores sobre una posible salida surgen casi cada semana.
La Liga de Campeones es otra historia. Ahí sí luce todo el músculo. El portugués se convirtió en el primer futbolista en hacer goles en cada partido de la fase de grupos. Contabilizó nueve y hoy sumó otros dos.
«Busco siempre estar al mejor nivel, pero a veces las cosas no salen como nos gustaría. Pero la experiencia me ha enseñado que hay que seguir trabajando duro para alcanzar nuestros objetivos», señaló esta semana en una entrevista publicada hoy por la web «Goal».
Por si faltaran ingredientes para su reivindación, ahí va uno más. Su exhibición fue ante dos de los futbolistas llamados a ocupar algún día el trono que comparte con Lionel Messi. Neymar, de 26 años, y Kylian Mbappé, de 19, dieron miedo con su enorme zancada, pero dejaron el césped del Santiago Bernabéu cabizbajos.
Cristiano Ronaldo ya no puede presumir de esa velocidad endiablada de sus inicios, pero el gol está intacto. «Mr. Champions» está muy vivo y el Real Madrid también.
Por Ignacio Encabo (dpa)